19 mar 2010

Una orgía llamada muerte

Se agitan sus cuerpos en éxtasis oscuros,
danzando en las tinieblas, bebiendo del vino de la muerte,
cantando al compás de la llama jadeante,
que al mezclarse con sus cuerpos crea tentación al ángel.

Lujuria y libertad son nuestros mejores frutos,
cosechados dulcemente, consumidos lentamente.
Ven a disfrutar con la gran ramera,
la puerta está abierta, para todos aquellos que quieran la muerte.

Canta felizmente en tus últimos momentos,
se cierran las puertas del recuerdo,
mira como la llama arde, mientras los cuerpos se consumen,
cayendo suavemente, como semen sobre el cuerpo.

-2006-

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